viernes, 17 de agosto de 2012

La producción agraria

Los críticos de siempre dicen adustos: la coyuntura mundial empujan a un modelo productivo extractivista y primario exportador que potencia el carácter dependiente del capitalismo argentino al sistema mundial. Producto de la sequía estadounidense, principal productor agrario del mundo, competidor directo de la Argentina en sus producciones agrícolas, especialmente maíz, soja o trigo, el resultado está siendo el incremento de los precios internacionales de los principales productos de exportación de la Argentina. No solo de minerales o metales preciosos (oro y plata), soja o maíz, sino también derivados, como los aceites o el biodiesel, tendencia creciente de utilización “alternativa” de la producción agraria. Muy bien, esta mal que la Argentina saque provecho de un modelo extrativista, pero ese modelo esta bien para EEUU, que es el principal productor agrario del mundo. Si lo hace la Argentina esta mal, si lo hace EEUU esta bien. Jajajaja. manga de idiotas. Por primera vez en la historia de la humanidad la producción agrícola se utiliza con destinos distintos a la alimentación, para intervenir como base de sustitución de energía ante la crisis petrolera o energética. Se estima que un tercio de la producción maicera de EEUU, el principal productor mundial del grano, tiene destino en la producción de bioenergía. La Argentina se insertó en el capitalismo mundial con la “generación del 80” del Siglo XIX, ocupando un lugar complementario con Inglaterra. Los oligarcas potenciaron el carácter de proveedores de materias primas y la dependencia del ingreso de productos manufacturados desde la fábrica inglesa. A eso se le llamó modelo primario exportador. Este modelo no debe ser desalentado, ni entorpecido, sino complementado con un modelo industrial simultaneo. Fue el segundo paso de los oligarcas el equivocado, no el primero. Actualmente, la Argentina potenció la sojización y la mega minería a cielo abierto y esta bien pero esta mejor que parte de la renta agraria sea apropiada por el Estado vía retenciones, unos 8.500 millones de dólares en 2011, que, fondo sojero mediante, favorecen un gasto público en todos los municipios, con inversión en infraestructura. Con precios en alza, la estimación de recaudación por derechos de exportación (retenciones) para el presente año alcanza a los 11.000 millones de dólares. Mediante el Decreto 1339/2012, publicado en el Boletín Oficial el 7 de agosto pasado se incrementaron “las alícuotas de los Derechos y del Reintegro a la Exportación para las mercaderías identificadas como biodiesel y sus mezclas”. Se incrementan las retenciones al biodisel del 14,2 al 24,2. Argentina se transformó en un gran exportador de biodiesel. Hasta ahora, las retenciones a la exportación de aceites eran de 32%, contra el 14,2% que tributaban las exportaciones de biodiesel. La diferencia, un 17,8% constituyó una renta apropiada privadamente. Desde ahora las retenciones a la exportación de biodiesel subirán al 24,2% achicando la rentabilidad privada y mejorando la ecuación fiscal. Pelito pa la vieja.

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