Sálvese quien pueda y como sea

El tema de las tres grandes automotrices se ha convertido en Estados Unidos en un gran problema ya que los republicanos se resisten a apoyar la ayuda a General Motors, Krysler y Ford, con fondos federales. El fundamento es que no existen razones válidas para que el Estado Federal utilice fondos de los contribuyentes para resolver los problemas de estas corporaciones, aunque si existían para salvar a banqueros estafadores. Estos senadores fueron los mismos que apoyaron incrementar el déficit del Tesoro Americano en cientos de miles de millones de dólares para invadir y arrasar a Afganistán primero e Irak posteriormente. Ambas incursiones, que costaron miles de vidas no solamente de los países involucrados, sino también del país invasor. Miles de vidas no solamente de soldados, también víctimas civiles que nada tenían que ver con estos conflictos. Esta son las reglas rígidas del capitalismo liberal. Quedó todavía flotando en los mercados la alternativa que la Reserva Federal utilice parte de los 700 mil millones de dólares aprobados por el congreso para salvar a los forajidos de las finanzas. Con la declaración de la recesión de Rusia, prácticamente toda Europa está sumida en el retroceso de la actividad y del empleo. Así, conjuntamente con Japón el mundo capitalista desarrollado no crecerá en el 2009. Y ahora no solo Argentina no tienen crédito por castigo a su heterodoxia, también se ha instalado la ausencia de crédito en los mercados internacionales para toditos. Conforme se tambalea la economía mundial, China (el nuevo tío rico), con sus 1,9 billones de dólares en reservas y una economía que marcha a paso lento, pero que se mantiene fuerte, ofrece la posibilidad de ayuda a los estadounidenses. China cuenta ahora con más de medio billón de dólares en bonos del gobierno estadounidense, mucho más que cualquier otra nación, y Washington necesita que Beijing continué comprándolos, a fin de financiar la deuda nacional y el paquete de rescate financiero, de 700.000 millones de dólares. Y aunque la economía de China depende mucho de las exportaciones a Estados Unidos, también se ha convertido en un enorme mercado para los productos estadounidenses, por lo que el cese de las relaciones comerciales, una vieja amenaza que Washington usaba para “atemorizar” a China, suena mas a chiste que amenaza. En otra epoca Obama pidió a Bush que boicoteara las olimpíadas en Bejing. Ahora el Grone esta tratando de borrar todos los archivos. Finalmente, el ultraderechista y proyanqui Uribe anunció una amnistía tributaria para los capitales que regresen al país. Igualito que Kichrner. Adolfo Canitrot, viceministro de economía del inepto Sourrouille durante el gobierno del patético Alfonsín, dijo una vez lo siguiente: "Si te estás ahogando en medio del río y pasa justo la lancha de los narcotraficantes, ¿no te subís?".