En Finlandia el Gobierno se dio cuenta de que la economía tradicional tenía que transformarse con tanta celeridad como fuera posible en una economía del conocimiento y que ello sólo podía lograrse mediante la inversión en educación, investigación y desarrollo. Sin embargo, los recursos financieros son inútiles a menos que se invierta con inteligencia, lo que requiere una política científica con visión de futuro. La política científica finlandesa es responsabilidad de la Junta Nacional de Ciencia y Tecnología, formada por científicos de relieve, directores de empresas con investigación intensiva y los ministros de Investigación, Industria y Comercio. El presidente de la Junta es el primer ministro, o sea, presten atención: para que lo entiendan los argentinos: el “presidente” de Finlandia es al mismo tiempo el director de la CONICET finlandesa. O sea, ciencia y política para los finlandeses ES LO MISMO. ¿Comprenden como viene la mano?. Los principales organismos a través de los cuales se canaliza la inversión en I+ D son los consejos de investigación - que reciben el nombre colectivo de Academia de Finlandia (AF)-, la Agencia Nacional de Tecnología (Tekes) y el fondo de inversiones Sitra. La Academia de Finlandia financia la investigación básica de alta calidad, mientras que la Agencia Nacional de Tecnología financia el desarrollo que llevan a cabo tanto los investigadores universitarios como las empresas. Por su parte, Sitra financia la puesta en marcha de empresas con investigación intensiva. El Ministerio de Educación creó hace diez años una red nacional de centros universitarios con el fin de impulsar la colaboración con la industria. La investigación puntera produce innovaciones significativas y, por lo tanto, la investigación universitaria está vinculada de manera irreversible con el desarrollo económico de la sociedad. Tekes se creó para ayudar a transferir a las empresas las innovaciones de la universidad y para catalizar la investigación y las innovaciones en las mismas empresas. Señores, ¿no tienen la sensación de que el atraso en que vivimos lo tenemos totalmente merecido?, mientras los finlandeses están en el siglo 21 nosotros seguimos en el siglo 19, lo cual es literalmente cierto: la estructura productiva de este pais no ha cambiado basicamente desde entonces.
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