ABRIR LOS OJOS

Hay que abrir los ojos y observar buscando en la realidad historica la respuesta a las siguientes preguntas: ¿es verdad que sin una modernización previa de las fuerzas productivas en la agricultura no es posible esperar un desarrollo industrial exitoso? ¿la industrialización debe comenzar necesariamente en sectores vecinos a la agricultura antes de que se dé el paso a la gran industria? ¿es decisivo impulsar los mercados de masas en los que predominan los productos menos complejos puesto que promueve el crecimiento del mercado interno?, ¿la movilización de capacidades a través de un sistema educacional diferenciado es capaz de proporcionar las bases para la generación de innovaciones? ¿es verdad que una protección exagerada frena las innovaciones y una protección demasiado escasa desalienta los esfuerzos propios?, ¿se debe practicar una selección apropiada de medidas de promoción y de protección de determinadas áreas industriales?, ¿se debe industrializar por industrializar, descuidando la agricultura?. Algunas de estas preguntas tienen ya respuesta: LOS PAÍSES SEMI-INDUSTRIALIZADOS, POBRES EN RECURSOS NATURALES, DEL ESTE DE ASIA HAN DEMOSTRADO CÓMO LA INSISTENCIA EN LA EDUCACIÓN PUEDE PRODUCIR MILAGROS EN EL DESARROLLO. De la muy diversa historia del desarrollo de las sociedades europeas se pueden extraer también lecciones positivas y negativas. ¿Por qué se desarrollaron algunas partes de Europa y otras se subdesarrollaron? Los conocimientos históricos respectivos son de suma importancia, de igual modo que el debate sobre la pregunta, ¿por qué el este de Asia ha tenido en los últimos 50 años un desarrollo tan diverso al resto del Tercer Mundo?. Es evidente que es una necesidad urgente tener nuevas visiones del mecanismo por el cual se produce el desarrollo economico, y para lograr esas nuevas visiones hay que tener los ojos muy atentos y bien abiertos.