En Grecia la recaudación de impuestos es cada vez menor por la recesión y crece el déficit presupuestario. Mientras los líderes europeos se desvelan por preservar la unidad monetaria,Grecia se está quedando rápidamente sin dinero. Las arcas del Estado podrían quedar vacías de manera inminente, incluso en julio, poco después de las cruciales elecciones del 17 próximo. En el peor de los casos, tal vez Atenas tenga que detener temporariamente el pago de salarios y jubilaciones, así como las importaciones de combustibles, alimentos y medicamentos. Devanándose la cabeza en busca de soluciones, los funcionarios del gobierno evaluaron la posibilidad de echar mano de los fondos que debían ser para ayudar a los bancos griegos más acuciados. Algunos incluso están sugiriendo pagar con bonos. Los líderes de Grecia aseguraron que, a pesar del último rescate de 130.000 millones de euros, enfrentan un déficit de 1700 millones debido a la caída de la recaudación y otras fuentes de ingresos. La recesión galopante y los severos recortes presupuestarios dejaron a individuos y empresas sin impuestos que aportar y con muy pocos incentivos para pagar lo que deben. El déficit presupuestario se agranda más y más, mientras la llamada "troika" de acreedores (el FMI, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea) retiene 1000 millones de euros en financiamiento de rescate, a la espera de saber si el nuevo gobierno cumplirá con los compromisos asumidos. Aunque la "troika" libere ese dinero, Grecia tendrá problemas para cubrir sus obligaciones.
Fuente
No hay comentarios.:
Publicar un comentario