jueves, 26 de enero de 2006

El MERCOSUR cruje

El andamiaje del Mercosur esta crujiendo. El Uruguay no puede hacer un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos sin irse del Mercosur. La unión aduanera tiene un arancel externo común y uno de los socios no puede hacer libre comercio con otro país por su lado sin salirse del arancel común. Una opción es que Uruguay reduzca su status al que tiene Chile, para lograr margen de maniobra respecto de terceros países. Pero si así fuera, el Mercosur ya nunca sería el mismo y la sola negociación de Uruguay con Estados Unidos seria un golpe casi mortal para el MERCOSUR. Las quejas desde Uruguay y Paraguay son crecientes, aunque también lo son las de la Argentina respecto de Brasil. La apuesta ha sido mantener y agrandar el Mercosur, pero hasta ahora se lo ha hecho SIN ATENDER LAS ASIMETRÍAS. En el gobierno uruguayo hay dos líneas de pensamiento, una dirección busqueda autonomía, y de cauteloso acercamiento a Estados Unidos. Uruguay no está conforme con el Mercosur. Los hechos muestran que hasta el momento Brasil fue poco comprensivo con la Argentina, y que Brasil y la Argentina fueron poco comprensivos con Uruguay y Paraguay. Los beneficios del Mercosur se concentraron. El proceso de integración sólo se liberalizó el comercio y se adoptó un arancel externo común, pero no se avanzó en armonizar políticas para que la distribución de beneficios sea pareja. Es evidente que los socios grandes tuvieron mayores beneficios. Brasil, por caso, ENTREGA FUERTES INCENTIVOS PARA ATRAER INVERSIONES y, para colmo, le cierra la entrada a producciones de los socios menores, como ocurre con el arroz de Uruguay. En Europa los socios mayores hicieron grandes concesiones –inclusive en dinero- a favor del desarrollo de los chicos. Es lo contrario de lo que se ha hecho en el Mercosur. Ni Brasil ni la Argentina quieren jugar en el bloque sudamericano el rol que tuvo Alemania en Europa. ¿Qué opciones le quedan entonces a Uruguay?Explorar acuerdos comerciales con todos los países. Si existieran concesiones de parte de Estados Unidos para con Uruguay estarían dispuesto a discutir la posibilidad de un acuerdo aún contra sus principios más tradicionales. EEUU que sabe que dividiendo domina, estaría dispuesto a hacer concesiones como bajar aranceles y subsidios para que Uruguay se vaya. Resulta que Uruguay no tiene una industria para perder en la competencia con el gigante del norte, y además se debe tener en cuenta que hoy Estados Unidos es su principal cliente por encima de sus vecinos. Así, Uruguay se debate entre su apuesta al Mercosur y la intención de aprovechar los potenciales beneficios del libre comercio con Estados Unidos. Los grandes consumidores de los productos de Uruguay no están en el bloque sino afuera. Debemos ser realistas, si queremos que Uruguay no nos deje y se largue con EEUU debemos recompensarlo. El problema es que los yanquis tienen fondos suficientes como para ofrecer una recompensa mayor. Entonces, Uruguay, como las putas, se irá con el que mas le pague.

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