Petroleo y niquel cubano

Estudios geológicos que estiman que Cuba tiene reservas submarinas por 1.600 millones de barriles de petróleo han despertado la codicia de varias petroleras. Las nuevas expectativas de las empresas petroleras están basadas en que muchos expertos en el tema creen que Cuba podría extraer petróleo comercialmente a un kilómetro y medio por debajo de las aguas del Golfo de México, ya que habría allí un crudo de mayor calidad que el que tradicionalmente se extrae en Cuba. Y efectivamente, la aparición de un pozo en el subsuelo marino con abundante petróleo de buena calidad ha decidido a numerosas empresas a tentar suerte en las aguas del Caribe cubano. Este yacimiento de petróleo estimado en unos 100 millones de barriles fue descubierto frente a las costas de Cuba por las compañías canadienses Sherritt International Corp. y Pebercan Inc. El yacimiento, primero de su tipo encontrado en la isla desde 1999, se localiza frente a un segmento de la costa de la localidad de Santa Cruz del Norte, unos 55 kilómetros al este de La Habana. El nuevo campo petrolero de Santa Cruz, a 53 kilómetros al este de la capital, entrará en producción en el 2006. El prospecto Santa Cruz abarca unos 20 kilómetros cuadrados y está situado en el mar, a unos dos kilómetros y medio de la costa, frente a la Central Termoeléctrica del Este de La Habana. Durante muchos años, después de que los soviéticos abandonaran la isla, sólo la empresa canadiense Sherrit participó en la prospección y extracción de petróleo, pero eso ha cambiado. China avanza viento en popa en esta área, ya a lo largo de toda la costa norte se pueden ver sus torres de perforación sustituyendo en muchos casos los equipos de la empresa canadiense Sherrit. El monopolio estatal Cubapetróleo (Cupet) y la gigantesca corporación mixta China Petroleum and Chemical Corporation (Sinopec) buscan petróleo en Cuba. Sinopec es la mayor productora y comercializadora de refinados en Asia, la mayor productora y distribuidora de petroquímicos en China y la segunda extractora de gas y petróleo de ese país. El consorcio chino se une así a las canadienses Sherritt y Pebercan; a la española Repsol, y a la brasileña Petrobras, en la asociación en diferentes grados con la industria petrolera cubana. La empresa petrolera Repsol-YPF invertirá 50 millones de euros (unos 57 millones de dólares) en la exploración petrolera de las aguas jurisdiccionales cubanas. ¿Y los yanquis? Tampoco quieren quedarse fuera. Una de las mayores compañías estadounidenses de servicios petroleros, Halliburton Co., se pronunció a favor del levantamiento de las sanciones económicas contra Libia, Irán y Cuba, porque empresas de otros países les llevan la delantera a las de Estados Unidos. Nunca antes, desde la época soviética, Cuba había contado con tantas posibilidades en el terreno energético, esto sin mencionar que ya recibe 90 mil barriles diarios de petróleo de Venezuela a precios preferenciales y a pagar a largo plazo. Pero los chinos van por mas. El grupo chino Minmetals invertirá unos 500 millones de dólares en una planta de níquel en Moa (Holguín, este de Cuba), participada en un 51 por ciento por Cuba y en un 49 por ciento por China. La isla cubana posee una de las principales reservas mundiales de niquel. El Gobierno cubano ha confirmado que ya ha comenzado a explorar nuevos yacimientos de níquel, materia prima que se ha convertido en la estrella de las exportaciones cubanas (representan más del 60% del total). Por este motivo, la administración de la isla está impulsando un plan que prevé en dos años el incremento de la producción de este metal hasta las 121.000 toneladas desde las 75.000 toneladas que se producen anualmente. El plan del Gobierno cubano para incrementar en más de un 60% la producción de níquel contará también con el apoyo de inversiones canadienses. Hace unos meses la firma Sherritt International anunció la inversión de 450 millones de dólares (372 millones de euros) para la ampliación de la empresa mixta que opera en este sector.
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