¿Capital humano o capital financiero?

La economía como disciplina nació hace 230 años en un libro de un profesor escocésde filosofía moral llamado Adam Smith. Smith sentó la tesis de la existencia de la “mano invisible”, los neoliberales avanzando mas en la fantaciencia inventaron el “efecto derrame”. ¿En que consiste este engaño?: en que iniciado un proceso de crecimiento, si bien al principio se benefician los sectores de altos ingresos, luego desde éstos se va produciendo un derrame de riqueza hacia los estratos medios y bajos de la sociedad. ¿Qué es lo que sucede en la realidad?: lo que ocurre es un derrame de más desempleo, de más marginalidad, de más desigualdad, de más endeudamiento del Estado, de más debilidad institucional. Los países exitosos nos enseñan que el desarrollo humano y el desarrollo institucional preceden al desarrollo material y no viceversa. Son las en realidad son las instituciones fuertes las que permiten arribar a una economía fuerte, y no al revés, ya que una economía en crecimiento no es sustentable y pronto se desvanece si no es acompañada por instituciones sólidas y consolidadas. Lo que produce efecto derrame no es la acumulación de riqueza en los mas ricos, sino la acumulación de conocimiento en los mas estudiosos. La experiencia demuestra que el bienestar aparece cuando los países invierten cifras elevadísimas en educación, investigación y ciencia. En cambio, los planes económicos convencionales privilegian sólo metas de inversión, producción, exportaciones como si con eso fuera suficiente. Incluso países latinos y católicos como Italia y España, son hoy países desarrollados porque desde los años 70 privilegiaron el fortalecimiento de sus instituciones educativas, contradiciendo la clásica tésis del sociólogo alemán Max Weber, en su célebre publicación de 1904, de que el desarrollo del capitalismo era patrimonio exclusivo de sociedades anglosajonas signadas por una ética protestante ascética cultivada por puritanos, hugonotes, calvinistas y presbiterianos que habitaban Inglaterra, sus colonias y el norte de Europa. El capital humano y social es mucho mas importante (y económicamente mucho mas rentable) que el capital físico y financiero. Los obtusos liberales jamás entenderán esto.